Para que nuestro organismo aprenda a vivir en altura geográfica, aclimatarse y acomodarse a una menor presión parcial de oxígeno, la que disminuye a medida que ascendemos, a un clima extremo, debemos educarnos e instruírnos para afrontarlo de la manera más eficiente y que nuestro organismo sufra un menor daño.
Educarse es la clave...